PANAMA (AP) — Con un cordial apretón de manos vespertino, el presidente Barack Obama y su homólogo cubano Raúl Castro se dirigieron el viernes a una innovadora reunión al margen de la Cumbre de las Américas en lo que sería una excepcional demostración de reconciliación entre dos naciones.
redacción Larepública.Ec | 11 de abril de 2015
El poderoso simbolismo de un trascendental intercambio el sábado entre los mandatarios con la directiva del Hemisferio Occidental en torno a ellos podría ser una señal de progreso. Ambas partes siguen trabajando en asuntos espinosos que derivarían a la apertura de embajadas en Washington y La Habana, la primera etapa de una nueva relación diplomática.
Las primeras pistas visuales de una mejora en la relación —al menos entre líderes— se presentó el viernes por la tarde mientras Obama y Castro llegaban al centro de convenciones de la ciudad de Panamá para la ceremonia de inauguración de la cumbre. Un reportero de un canal de televisión de Venezuela publicó un video en internet en que se ve a ambos saludándose tranquilamente con varios apretones de mano y una breve charla, ante la mirada del secretario de la ONU, Ban Ki-Moon, y del ministro cubano del Exterior Bruno Rodríguez.
La Casa Blanca indicó que la interacción fue de carácter informal y señaló que no sostuvieron una conversación sustancial. Se espera que los dos mandatarios tengan un diálogo más extenso el sábado —la primera conversación extensa entre los líderes de Estados Unidos y Cuba en más de 50 años.
Obama, durante su discurso en una reunión ante grupos de la sociedad civil, dijo que las medidas para poner fin a las relaciones hostiles entre ambas naciones es un triunfo para el pueblo cubano.
“Mientras Estados Unidos inicia un nuevo capítulo en nuestras relaciones con Cuba, esperamos que éstas generen un ambiente que mejore la vida del pueblo cubano”, dijo a los presentes, entre quienes se encontraban disidentes cubanos. “No porque sea impuesta por nosotros, Estados Unidos, sino por medio del talento y el ingenio y las aspiraciones, y las conversaciones entre cubanos de todos los estamentos sociales a fin de que puedan decidir cuál es el mejor camino para su prosperidad”.