WASHINGTON (AP) — La Organización de Estados Americanos (OEA) concluyó una sesión especial sin ningún acuerdo para avanzar hacia una salida de la crisis en Venezuela, que el miércoles fue escenario de nuevas protestas contra el gobierno del presidente Nicolás Maduro.
Venezuela consideró el resultado como un triunfo. Su canciller Delcy Rodríguez señaló que los adversarios de Maduro dentro y fuera de Venezuela “deben sentirse profundamente frustrados de que la OEA no les dio el respaldo que ellos han estado buscando y que han estado pretendiendo”.
Después de deliberar cerca de tres horas, los cancilleres de 18 países de la OEA acordaron retomar las negociaciones en un encuentro posterior en una fecha aún por definir, aunque sería antes de la Asamblea General prevista para el 19 de junio en el balneario mexicano de Cancún.
Al intervenir a nombre del bloque caribeño Caricom, el canciller de Bahamas, Darren Henfield, propuso dar por culminada la reunión. “Estamos cerca de lograr consenso. Flexibilidad es necesaria para alcanzar consenso”, indicó.
Justo después de la sesión, el canciller mexicano Luis Videgaray dijo a periodistas: “nuestros embajadores seguirán trabajando. Estamos dispuestos a trabajar para lograr acuerdos que fortalezcan a una nación hermana y a la democracia en el continente”.
Videgaray pronunció sus comentarios a nombre de 14 países y no respondió preguntas.
La imposibilidad de que los cancilleres acordaran una declaración fue el resultado menos deseado para las naciones que llevan meses gestionando este encuentro a nivel ministerial.
Sin embargo, el representante interino de Estados Unidos, Kevin Sullivan, rechazó que la ausencia de una declaración equivalga a un fracaso de la organización hemisférica porque “fue un gran paso la gran asistencia de ministros. Fue la primera reunión de ministros que hemos tenido para abordar la situación en Venezuela”.
En la sesión extraordinaria, que llevó a Caracas a anunciar su retiro del organismo, varios países aprovecharon su intervención para pedir a Maduro que desista de convocar una Asamblea Nacional Constituyente por considerarla inconveniente para superar la crisis política. “Para lograr una cohesión social consideramos que la convocatoria de la asamblea Constituyente en este momento es negativa para el país”, dijo la canciller colombiana María Angela Holguín.
Un proyecto de resolución presentado por Perú, Canadá, Estados Unidos, México y Panamá solicitaba a Maduro no solo que desista de sus planes de celebrar una Asamblea Nacional Constituyente para reformar la carta magna, sino también que libere a los presos políticos, elabore un calendario electoral y acepte asistencia humanitaria internacional, tal como reclama la oposición venezolana.
Sin embargo, otra propuesta presentada por Guyana a nombre del bloque caribeño Caricom no mencionaba a la Constituyente y se limitaba a solicitar al gobierno venezolano que reconsiderara su decisión de retirarse de la OEA. Caracas inició el mes pasado un trámite de dos años para abandonar el organismo alegando que esta reunión de los cancilleres representaba una intromisión inaceptable en sus asuntos internos.
El proyecto de Guyana también llama al cese inmediato de la violencia, la adopción de “planes concretos” para restaurar la paz y que el gobierno y la oposición venezolanos se comprometan a un renovado proceso de diálogo.
La silla correspondiente a Venezuela permaneció vacía, pese a que su embajadora ante la OEA Carmen Velásquez se había acreditado para asistir.
Las más recientes manifestaciones opositoras en Venezuela, que comenzaron a finales de marzo, han dejado al menos 60 muertos, más de 1.110 heridos y varios centenares de detenidos.
En Caracas, varios miles de opositores protagonizaron el miércoles otra nueva jornada de protestas. Centenares de guardias nacionales, con el apoyo de tanquetas y al menos cuatro camiones cisternas, les bloquearon el paso y usaron los medios de costumbre para dispersarlos.
“Es importante que el mundo vea que los venezolanos estamos luchando por nuestra constitución”, dijo el dirigente y excandidato presidencial Henrique Capriles al llamar a los opositores a mantenerse en las calles ante la sesión de la OEA. Capriles expresó que la oposición no aceptará la sentencia que anunció este miércoles el Tribunal Supremo de Justicia en la que ratificó que no hace falta un referendo consultivo para convocar una Asamblea Nacional Constituyente, tal como sostienen opositores y juristas que consideran el proceso como un “fraude constitucional”.
Varios cientos de seguidores del gobierno y empleados públicos realizaron también una movilización “antiimperialista” en el centro de Caracas en protesta contra la OEA.
Fuente: Larepública