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En el quinto día de audiencia, los jueces escucharon embebidos el revelador testimonio de José Conceição Santos.
Los ánimos en la sala de audiencias del octavo piso se han relajado. Sin embargo, el vicepresidente, Jorge Glas, se cuida de jamás cruzar su mirada con Ricardo Rivera, su tío. Hoy se cumple el  sexto día de audiencia de juicio, por el presunto delito de asociación ilícita en la trama de Odebrecht, y la Fiscalía está cerca de concluir con sus pruebas.

La jornada de ayer se desarrolló con dos puntos centrales: escuchar las grabaciones de los testimonios anticipados del testigo protegido y exmano derecha de Rivera; y del exdirectivo de la constructora brasileña José Conceição Santos, principal delator de la trama.

Al inicio de la audiencia, sin embargo, Glas aprovechó para hablar con la prensa. “Todos los testimonios son realmente a mi favor. Ustedes escucharon cómo el ingeniero Eduardo Barredo, exgerente de Celec, manifestó que jamás le he pedido nada respecto a ninguna empresa”, dijo, en alusión a la adjudicación del contrato para la central hidroeléctrica Manduriacu.

Celec escogió la oferta de Odebrecht, que era de 124 millones, en lugar de otra que era 50 millones más cara. El presidente del tribunal penal, Édgar Flores Mier, se molestó ante el hecho de que uno de los procesados, quien además está preso, ofrezca declaraciones desde la sala de audiencias, por lo que decidió prohibir todo tipo de entrevistas en el lugar.

La trama, según se ha visto  en el juicio

Los testimonios de Alcívar y Santos son importantes para este tribunal penal, a fin de reconstruir los presuntos hechos que configuraron la asociación ilícita y entender la teoría del caso de la Fiscalía. Mientras se proyectaban los videos que contienen los testimonios anticipados, los tres jueces, Sylvia Sánchez, Édgar Flores y Richard Villagómez, escuchaban con absoluta atención.

En ese testimonio del 27 de septiembre, Santos afirmó que “Jorge Glas y Ricardo Rivera son hermanos siameses, se alimentan y respiran de un mismo cuerpo, no hay diferencia alguna”, para explicar el modo en que las presuntas coimas se cobraban.
El contacto de Odebrecht con Rivera, según este testimonio, comenzó cuando Santos negociaba formalmente con el exministro Galo Borja el retorno de la constructora. Rivera le habría contestado que Borja no tenía poder de decisión, sino solo el ministro de Telecomunicaciones, cargo que en ese entonces ocupaba su sobrino. Pero aseguró que le hizo una advertencia: que para llegar a él tendría que pagar primero 2 millones de dólares.

Ese habría sido el primer pago entregado al tío del Vicepresidente. Entonces, agrega Santos, él estableció relación directa con Glas al punto de que se reunían 2 o 3 veces al año y, según el delator, Olga Muentes, la secretaria del segundo mandatario, le hacía pasar sin que se registrara.

Una vez concertado el acuerdo de pago, que habría consistido en porcentajes fijos de cada contrato de Odebrecht, Santos habría entregado 13,5 millones de dólares a Rivera.
El delator agregó que, en su despacho, Glas llamaba a ministros y les daba órdenes con base en lo que Odebrecht pedía. Mencionó a Esteban Albornoz y Rafael Poveda.

Santos afirma que, cuando se sintió incómodo por tener esas reuniones en el Palacio, Glas le habría respondido que el sitio era seguro. El delator reveló otro detalle: Glas ponía música y, por medio de su tableta electrónica, preguntaba si ya había hecho los pagos. “Odebrecht cumplió todos sus compromisos, los malos y los buenos”, dijo el exdirectivo.

El testimonio del testigo protegido, en cambio, fue recabado el pasado 20 de septiembre. Con él, la Fiscalía pretende demostrar la cercanía del tío y el sobrino. Según este testigo, Rivera le pidió que borrara la información de su computadora y sus teléfonos, luego del allanamiento a su canal, TV Satelital, pero él sacó un respaldo, que entregó a las autoridades.

El dinero

El entramado estructurado para ocultar los destinatarios de las coimas fue complejo. En el caso de Rivera, los más de 13 millones de dólares que Santos le habría pagado en coimas, se habrían dado mediante transferencia a empresas ‘offshore’ y en efectivo, gracias a pagos hechos por el Sai Bank.

Por ejemplo, en cuanto a las transferencias, la ‘offshore’ Select Engineering Consulting and Services, que forma parte de una de las 23 de Odebrecht, realizó pagos a Glory International Industry, creada por Tomislav Topic, dueño de Telconet, en la que Rivera habría recibido pagos. Según Santos, Rivera habría descrito a Topic como “amigo mío, que hace favores para mí”. (MMD)

Poveda
desmiente a Mera

El exministro de Sectores Estratégicos Rafael Poveda refutó ayer el testimonio del exsecretario jurídico de la Presidencia Alexis Mera, cuando afirmó que Rafael Correa no sabía sobre la adjudicación del poliducto Pascuales Cuenca.

“La ejecución de un proyecto de esa magnitud no depende de la idea de una persona, de un funcionario o de exclusiva voluntad de un ministro, mucho menos del Ministro Coordinador de Sectores Estratégicos”, señaló.

Fuente: LaHora

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