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“Ay Caro de mi vida te me fuiste para siempre”, eran las palabras que repetía Judith Fajardo mientras abrazaba fuertemente el ataúd de su nieta Jessenia Carolina Campuzano Rodríguez .

El cadáver de Campuzano Rodríguez de 19 años, fue encontrado el jueves 17 de mayo en avanzado estado de descomposición en unos matorrales de la vía a General Villamil Playas.

Su cuerpo presentaba huellas de violencia y de estrangulamiento. El principal sospechoso del crimen es su exconviviente, Jaime Abad Macías.

A él lo detuvieron en la vía a Chongón gracias a la versión del hijo de la pareja que tiene 4 años. Solo así la policía pudo saber dónde estaba el cuerpo de la mujer, ya que el niño narró cómo su padre había asesinado a su madre.

Judith Fajardo Quijije de 58 años con su voz entre cortada comentó a EXTRA, que el pasado domingo su nieta junto su hijo y conviviente salieron a las 4:30 a bordo de una motocicleta desde el Recinto Petrillo con dirección a Playas, ya que supuestamente se iban a disfrutar del mar.

“Me pareció raro que este hombre en pleno Día de la Madre se llevara a mi Carolina”. La sorpresa le vino porque hace 8 días exactos también habían salido a bañarse en la playa y no acostumbraban a hacerlo tan a menudo.

“La noche de ese mismo día los padres de él vinieron a ver la ropa del niño. Ellos dijeron que mi nieta se había ido en una buseta y el niño se lo había dejado al padre, para querernos despistar”, comentó.

Por la putrefacción que presentaba el cuerpo, el ataúd de Campuzano solo pudo ser velado cuatro horas y en medio de la consternación de los pobladores de Petrillo, se dio el sepelio en el cementerio general de Nobol.

  • Extra.ec

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