La Fundación Andina para la Observación y Estudio de Medios (Fundamedios), con sede en Quito, exigió hoy la inmediata liberación del informático sueco Ola Bini, detenido e investigado por supuestos vínculos con Wikileaks y haber penetrado de forma ilegal sitios web del Estado.
Fundamedios consideró, en un comunicado difundido este miércoles, que la detención del informático puede ser “arbitraria”, aunque aceptó que las investigaciones en su contra podrían continuar, pero con él en libertad.
“La investigación iniciada en Ecuador puede continuar, pero manteniendo los criterios del debido proceso. Mientras dure la indagación, el investigado debe gozar de libertad condicional, pues su detención puede resultar arbitraria”, afirmó la ONG.
Asimismo, remarcó que el proceso contra Bini debe “determinar si hubo o no un acto ilícito de penetración ilegal del sistema informático del Estado”.
Por ello, exigió a la “Fiscalía, al Consejo de la Judicatura y al Gobierno ecuatoriano garantizar el derecho al debido proceso”, así como “su inmediata liberación”.
Bini, desarrollador de software libre, fue detenido en el aeropuerto de Quito el pasado jueves, el mismo día en el que Ecuador puso fin al asilo de casi siete años del fundador de Wikileaks, Julian Assange, que se encuentra desde entonces en una cárcel de Londres pendiente de una decisión sobre su extradición a Estados Unidos por la difusión de documentos secretos.
El presidente ecuatoriano, Lenín Moreno, ha calificado a Assange de “terrorista informático”, que seleccionaba la información de acuerdo a “sus conveniencias” e intervenía en asuntos de otros países.
Bini conocía al fundador de Wikileaks desde hace años y lo ha visitado catorce veces en los últimos tres dentro de la embajada ecuatoriana en Londres, según el secretario personal de la Presidencia, Juan Sebastián Roldán.
Para Fundamedios, ante las aparentes irregularidades que se exponen en el proceso de arresto y prisión preventiva, es importante que se revise la detención por varias razones, como las que se expresan en estándares internacionales sobre el internet.
Por ejemplo, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) establece que “la relevancia de internet como plataforma para el goce y ejercicio de derechos humanos está directamente vinculada con la arquitectura de la red y los principios que la rigen, entre ellos el principio de apertura, descentralización y neutralidad”.
Además, sostiene que “si bien la protección de datos personales constituye un objetivo legítimo, en ningún momento puede ser invocada para limitar o restringir la circulación de información de interés público”.
Por ello, Fundamedios consideró que es “factible conducir una investigación sobre cualquiera que, ilegalmente, intercepte comunicaciones de organismos estatales”, pero remarcó que esta “no puede estar motivada por la sencilla inferencia de estar relacionada con Julian Assange y, por lo tanto, propiciar un arresto”.
Ello implicaría asumir que medios de comunicación internacionales como el New York Times, The Guardian o el Washington Post, que utilizaron la información de Wikileaks en 2006, “contribuyeron a desestabilizar gobiernos. Lo cual resulta inaceptable”.
“Wikileaks puede resultar molesto para varios Estados, pero es precisamente el derecho de publicar y editar información el que representa el ejercicio de la libertad de expresión”,subrayó.
Bini, de 36 años, fue arrestado cuando se dirigía a Japón, según sus padres, Dag Gustafsson y Görel Bini Gustafsson, que se encuentran en Quito desde el lunes, por su afición a las artes marciales. EFE