Con cánticos y la consigna “con mi Familia no te metas”, integrantes de organizaciones sociales y religiosas, ayer sábado, salieron a marchar por las principales calles de la ciudad de Zamora. La finalidad fue rechazar la decisión tomada por la Corte Constitucional en la cual se da paso al matrimonio civil igualitario entre personas del mismo sexo.
Los integrantes de la marcha dejaron claro que esta protesta no tiene fines religiosos, políticos u homofóbicos, sino que piden que se respete y no se vulneren los valores tradicionales de la familia, ya que según lo determina la Constitución en el artículo 67, el matrimonio es la unión de un hombre con una mujer.
José Gonza, párroco de la parroquia eclesiástica Nuestra Señora de Guadalupe, explicó que esta es una reivindicación de los derechos de la familia que fueron vulnerados con un dictamen que no representa la voluntad de todos los ecuatorianos. “El objetivo es dejar claro que el matrimonio igualitario es una farsa, es una invención de una minoría. Los respetamos, pero no respetamos que traten de imponer su voluntad ante más de 17 millones de ecuatorianos”, expuso el religioso.
Por su parte Sandro Iñiguez dijo que “esto no se trata de rechazar o estigmatizar a nadie, aquí lo que buscamos es que se tome en cuenta la opinión de todo el país, ya que cinco personas no pueden tomar decisiones por todos y sobre todo si violentan los derechos de nuestros hijos”.
El monseñor Walter Heras Segarra, vicario apostólico de Zamora Chinchipe, dijo que esta marcha se replicó en todas las provincias del país, lo que a su criterio demuestra el descontento de la sociedad ya que están violentando el núcleo familiar. “Queremos que el Estado ecuatoriano realice una consulta popular y tome en cuenta la decisión de todos; si se siguen aprobando este tipo de leyes inconstitucionales, nosotros continuaremos reclamando y llegaremos hasta las últimas consecuencias”, aseguró el religioso.
La marcha se desarrolló por las principales calles de la ciudad de Zamora y culminó en los bajos de la Gobernación de Zamora Chinchipe. Ahí, los ciudadanos exigieron al representante del Ejecutivo a que llame a referéndum para tomar en cuenta la decisión del pueblo ecuatoriano en la aprobación de leyes que, para su criterio, violentan la Constitución ecuatoriana.
Fuente: La Hora
