
Desde 2021, casi 500 presos han escapado de las cárceles de Ecuador, una situación que sigue preocupando a las autoridades, informa La Hora. Solo en 2024, 84 reclusos han evadido la seguridad, incluso en medio de la militarización de las cárceles, implementada desde enero. La más reciente fuga ocurrió el 5 de agosto de 2024 en el Centro de Privación de Libertad Manabí N.°4, donde cinco internos burlaron los controles de seguridad, según datos del Servicio Nacional de Atención Integral a Personas Adultas Privadas de la Libertad y a Adolescentes Infractores (SNAI).
A pesar de los esfuerzos por mejorar la seguridad en los centros penitenciarios, las estadísticas revelan que en los últimos tres años, 476 reclusos han escapado, con solo 84 de estos casos reportados en 2024. Según la Fiscalía General del Estado, durante este año se han registrado 84 denuncias por fugas y cinco intentos frustrados, reflejando la gravedad del problema.
Fugas emblemáticas y métodos ingeniosos
Entre las fugas más notorias está la de Adolfo Macías, alias «Fito», líder de la organización criminal Los Choneros. A pesar de un operativo de control, las autoridades anunciaron su desaparición de la Cárcel Regional No. 4 de Guayaquil en enero de 2024. Seis meses después, su paradero sigue siendo desconocido, a pesar de las medidas de seguridad implementadas, según informa La Hora.
Otra fuga significativa fue la de Fabricio Colón Pico, alias «El Salvaje», quien escapó de la cárcel de Riobamba, aprovechando una fuga masiva. Colón Pico, acusado de intentar asesinar a la fiscal general Diana Salazar, fue recapturado el 22 de abril de 2024 y trasladado a la cárcel de máxima seguridad La Roca.
Las evasiones de las cárceles ecuatorianas a menudo involucran métodos elaborados, dignos de películas de acción. Por ejemplo, el 10 de junio de 2024, en Quito, tres reclusos intentaron escapar durante un traslado al Hospital Pablo Arturo Suárez, aprovechando un ataque armado. Solo uno de ellos, Jairo Zambrano, logró huir, presuntamente vinculado a la banda de Los Lobos.
El uso de visitas médicas como excusa para evadirse se ha convertido en un modus operandi común. El 22 de julio, en Guayaquil, un grupo armado provocó la fuga de cuatro reclusos que eran trasladados a un centro de salud, según detalla La Hora. A pesar de las medidas de seguridad, las autoridades del SNAI no han proporcionado respuestas sobre el número de fugitivos recapturados o el personal involucrado en estas evasiones.
Cifras de fugas en los últimos años
Los registros de la Fiscalía General del Estado muestran que en 2021 hubo 127 fugas y 13 intentos; en 2022, 135 fugas y 8 intentos; en 2023, 101 fugas y 3 intentos; y en lo que va de 2024, 84 fugas y 5 intentos.