El Legislativo aprobó una reforma constitucional impulsada por el presidente Noboa. El tema irá a referéndum tras el dictamen de la Corte Constitucional
Redacción nacional
Quito | 3 de julio de 2024 — La Asamblea Nacional del Ecuador aprobó este martes, en segundo debate, un proyecto de reforma parcial al artículo 5 de la Constitución, que permitiría el establecimiento de bases militares extranjeras en el país. La iniciativa fue promovida por el presidente reelecto, Daniel Noboa, como parte de su estrategia para enfrentar al crimen organizado transnacional.
Según reportó el portal digital LaRepública.ec, la moción recibió el respaldo de 82 legisladores pertenecientes al bloque oficialista, así como de representantes de Pachakutik, el Partido Social Cristiano (PSC) y asambleístas independientes. En contraste, el bloque de la Revolución Ciudadana se opuso o se abstuvo de votar, al considerar que dicha reforma compromete la soberanía nacional.
Los defensores de la medida recordaron que, durante la operación de la Base de Manta entre 2000 y 2009, las incautaciones de droga aumentaron un 498 %. A su juicio, la clausura de esa instalación coincidió con un repunte de la violencia, que en 2023 alcanzó una tasa de 42 homicidios por cada 100.000 habitantes.
Desde la bancada del PSC, el legislador Alfredo Serrano advirtió que esta reforma no resolverá por sí sola el problema de la inseguridad. Además, aclaró que actualmente no hay ningún país que haya solicitado establecer tropas o instalaciones militares en territorio ecuatoriano. No obstante, apoyó la propuesta por considerarla un instrumento útil para futuras decisiones estratégicas.
El texto será remitido a la Corte Constitucional para su revisión. Si obtiene dictamen favorable, el Consejo Nacional Electoral convocará a una consulta popular. La ciudadanía deberá pronunciarse sobre la eliminación de la prohibición constitucional para establecer o ceder bases militares a fuerzas armadas extranjeras.
De aprobarse la reforma en las urnas, Ecuador modificaría uno de los pilares de su política de defensa y seguridad, dando paso a una nueva etapa en su relación con actores internacionales en la lucha contra el crimen organizado.
